The lovely Cher of The Not So Exciting Adventures of a Dabbler was our July Daring Cooks’ hostess and she asked us to create homemade yogurt in our own kitchens! No incubators needed, no expensive equipment or ingredients, just a few items and we had delicious yogurt for a fraction of the cost and a whole lot healthier than what you buy in the stores!

Never made yogurt before, but I can say that I have discovered a world of possibilities. I did enjoyed the challenge alot!

I made the yogurt in the traditional way. Just keeping the mixture warm into the oven.


Para este yogurt no se necesita yogurtera, aunque si la tienes puedes usarla :)

Ingredientes:
2 litros de leche fresca entera
2 yogurts naturales enteros (yo los puse bio)
200 gr de crème fraîche (crema fresca)
La piel de 1 limón
2 ramas de canela
4 c/s de leche en polvo
1 termómetro (puedes hacerlo a ojo, pero yo he descubierto que usando el termómetro, y estando seguro de la temperatura tanto yogurt, como quesos, salen mucho mejor)

c/s = cuchara sopera

Preparación:
Antes de comenzar con el proceso esterilicé los botes a usar hirviéndolos en agua. Yo guardé los tarros dentro del agua y de la olla hasta el momento de rellenarlos. Mis ollas guardan el calor durante mucho rato y aproveché el agua templada y el calor de la olla para hacer la incubación.

Ponemos en una olla los dos libros de leche, la piel del limón y las ramas de canela. Dejamos a fuego medio hasta que llegue a 85º C

Apagamos el fuego y dejamos infusionando hasta que enfríe.

Cuando la leche esté fría, retiramos la piel del limón y los bastones de canela y volvemos a poner la olla al fuego y calentamos hasta los 40º. Cuando llegue a esta temperatura apagamos el fuego.

Precalentamos el horno a 50º

En un bol mezclamos el yogurt, la crème fraîche y la leche en polvo. Añadimos un vaso de la leche templada y lo mezclamos todo muy bien con unas varillas.

Vertemos la mezcla en la leche y la mezclamos con las varillas.

Rellenamos los vasos o botes donde queramos poner el yogurt y los tapamos bien. Ponemos los vasos o botes dentro del agua templada que nos quedó de la esterilización, sin que llegue a cubrir los recipientes por completo. Tapamos con la tapa de la olla (si no lleva plástico) y metemos dentro del horno para incubar.

Yo dejé el horno un rato puesto y lo fui apagando y encendiendo cada 2 horas para mantener los 50º (aproximadamente... por la noche no me levanté a poner el horno... eso sí que no!! jajajaja). Dejé los botes reposando unas 16 horas. Pasado ese tiempo miré qué tal estaban y como ya habían cuajado los metí en la nevera.

Laura, del blog Una dieta para glotones nos ha dejado este truco en los comentarios  y como me parece muy interesante os lo pongo aquí. Muchas gracias Laura!!:

Truco: No hace falta calentar hasta que cuaje de todo, porque el yogur sigue tomando textura durante un poquito más de tiempo, así que cuando veas que CASI están ya puedes retirarlos.
Además, cuanto más los dejes, más ácidos te quedarán.

Una vez fríos podrás disfrutar de un rico yogurt. Eso sí, consúmelos máximo en 5 días... recuerda que no llevan ningún tipo de conservantes!

Que aproveche!!!

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