Comenzamos la semana olvidándonos de los ricos bombones de ayer e intentando volver al redil con comida más sana. Para ello os traigo una deliciosa receta de pollo adobado en citronela y chile. La citronela es el famoso lemongrass.
La verdad que nunca la había probado y ya cuando la manipulaba el olor me recordaba a una mezcla entre limón y jengibre... y así resultó ser. Toda la mezcla del adobo le da un sabor delicioso al pollo. Y como no lleva mucho aceite en la cocción, pues resulta bastante ligero. Para mí es una opción ideal a la pechuga de pollo a la plancha que a veces puede resultar muy aburrida.
La preparación es de lo más rápida y fácil, por lo que es apta aunque tengas prisas. Es mejor dejar el pollo en adobo al menos 20 minutos. Pero si por lo que sea se te olvida, puedes dejarlo reposar mientras cueces el arroz, o haces cualquier otra guarnición.
Veréis que entre los ingredientes no incluyo la sal, eso es debido a que lleva salsa de pescado que por sí ya es bastante salada y si le añadiésemos un plus de sal entonces, para mi gusto, quedaría demasiado saldo.
Os animo a probar este plato para descubrir nuevos sabores. Si no encontráis la citronela fresca, siempre podéis intentar encontrarla en especias secas. Quizás no será exactamente igual, pero seguro que se acercará mucho al sabor.
Y a ahora a por la receta!!!
Ingredientes (4 personas):
400 gr pechuga de pollo2 tallos de citronela
1 chile verde
2 dientes de ajo
1 c/s salsa de pescado thailandesa
1 c/s aceite de oliva virgen extra
1 c/s curry en polvo
100 ml caldo de pollo o vegetal
1 c/s azúcar moreno
c/s = cuchara sopera
Preparación:
Cortamos la pechuga de pollo en tiras. En un cuenco mezclamos la citronela picada muy pequeña, el ajo rallado, el chile picado al que le habremos quitado las semillas y la salsa de pescado. Añadimos el pollo y dejamos reposar unos 20 minutos en la nevera.Pasado ese tiempo ponemos una sartén al fuego con el aceite y el curry, calentamos bien hasta que el curry suelte su fragancia, pero con cuidado de que no se queme. Añadimos el pollo y lo hacemos por todos lados hasta que coja un color dorado.
Añadimos el caldo y el azúcar y dejamos a fuego suave hasta que el caldo reduzca y quede un poco espeso.
Servimos acompañado de arroz, de ensalada, o cualquier otra guarnición que sea de nuestro gusto.
Qué aproveche!!!
¿Has probado alguna vez la citronella?
Visto en el blog de Donal Skehan